Como es algo tradicional, en verano se juegan algunos torneos, tanto en Valdivia, de clausura, como en otras ciudades y ahora he ido a Osorno. Los resultados han sido muy pobres, pues ya no basta con los principios generales, cuando hay una pléyade de jóvenes que estudian por los nuevos sistemas de internet y están al día en torneos y novedades.
Sin que ello signifique un aspecto muy importante, no es menos cierto que no es posible a la edad de uno, simplemente jugar por entretenerse y ver tranquilamente como los muchachos lo hacen sufrir demasiado.
Esto requiere una decisión. No jugar más torneos, o darse el tiempo necesario para estudiar.
Como no concibo el abandonar mi pasatiempo predilecto, estoy condenado a estudiar, y así lo he decidido.
Para avanzar lo más rápido posible, he elegido dos libros de Edmar Mednis, mi autor favorito de los tiempos relativamente presentes.
Estos dos textos son: 1.- De la apertura al final.
2.- Consejos Prácticos para jugar el final.
¿Que es lo que pretendo?
Sencillamente seguir disfrutando del ajedrez, obteniendo al menos más de la mitad de los puntos en disputa.
Si lo lograremos o no, lo comentaremos el próximo verano.
Obviamente, al cabo de cuatro meses desde esta fecha, esto es, a fines de mayo, pasaremos revista a esta decisión.
La verdad es que respecto de los finales, he estado con el libro de Abrahams, la Técnica en ajedrez, y, en cuanto a las aperturas, he optado por mis partidas ejemplares, en lugar de estudiar aperturas propiamente tal.
ResponderEliminarVeremos en el verano, el éxito de este método.
Por ahora, iniciamos con Juan Carlos Tobar un nuevo match (el anterior lo gané el 2008 10-1)